domingo, 31 de mayo de 2009

Fauna en peligro



En menos de un año murieron más de 300 animales silvestres en rutas misioneras
El avance del hombre sobre el monte nativo misionero lleva a que muchos animales silvestres, entre ellos felinos de diversas especies, terminen atropellados en las rutas nacionales que cruzan la provincia de Misiones.
El desmonte y el avance de la frontera agrícola provocan la disminución del hábitat de yaguaretés, ocelotes, pumas y otras especies que habitan la selva paranaense.

En la zona norte de la provincia donde todavía queda selva y monte nativo la mayor amenaza para los felinos y animales de la selva paranaense es el pequeño productor, dueño de pequeñas parcelas, y tira abajo el monte nativo para cultivar entre otros soja. A esto hay que sumar el avance de las plantaciones de pino de las grandes empresas forestadoras que explotan el suelo misionero.

Planteado el problema y sus causas recordaremos algunas muertes de animales que están en vías de extinción. Por ejemplo, el yaguareté, “el rey de la selva misionera”, está en estado crítico. Su pariente, el ocelote, también. La desaparición del monte y la imprudencia en el asfalto son las causas principales. Las rutas 12 y 101, dentro del Parque Iguazú, lugares comunes donde encuentran la muerte. Y no son los únicos animales afectados: también gatos onza, margay, osos meleros, aguará popé, yacaré, agutíes, monos, coatíes. El pavimento atraviesa las reservas naturales y las aldeas de los dueño de la selva, la Nación Mby´a Guaraní.
El lunes 11 de agosto el diario digital El Paranaense publicaba: Alarmante: 6 felinos atropellados en 6 meses
La mayoría de los animales atropellados son derivados al Centro de Recría Güirá Ogá, en Puerto Iguazú, para su recuperación.
Tal es el caso de un ocelote que fue atropellado en Puerto Libertad en el mes de julio del 2008.
Es importante recordar que el ocelote es un gato que tiene una amplia distribución por casi toda Sudamérica y encuentra hoy en Argentina, sus mejores poblaciones en Misiones. Se encuentra en peligro de extinción.
Según explica Jorge Anfuso, responsable del Centro de Recría Güirá Ogá, este animal antiguamente sufría una mayor persecución por el valor de su piel, hoy el principal enemigo son las rutas asfaltadas que atraviesan áreas naturales protegidas.
En Misiones cada vez son más los parques con pavimento: Urugua- í (la ruta 19), Urugua-í – Foester (ruta 101, en construcción), Parque Iguazú (rutas 12 y 101), Cuñá Pirú (ruta 7) y Reserva de Biosfera Yabotí (ruta 2, en construcción).
Ante esta situación, Anfuso sugirió la necesidad de realizar una zonificación en toda la provincia de Misiones, es decir declarar zonas de selva que no deban ser tocadas para el cultivo y marcar otras zonas como aptas para el cultivo; priorizando que las áreas naturales protegidas estén conectadas para que sirvan de corredor y los pocos animales en vías de extinción propios de la selva paranaense puedan moverse en libertad.
Ante tanta depredación por parte de las pasteras, forestadoras y pequeños productores de las zonas donde todavía queda algo de selva en Misiones solo resta una breve frase que sirve para reflexionar: “Nadie puede amar y cuidar lo que no conocer”.